'' Id como una plaga contra el aburrimiento del mundo''

Gente que me hace feliz.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Diecisiete de Diciembre.

~. Uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, aún no creía esa pequeña frase hace mas de un año,
veía la vida como un juego de azar donde no existía el destino, toda mi persona era un ser rebelde que desprendía confianza y que podía y ahora también puede dar su vida por los que quiere, tener nobleza y fidelidad y llegar hasta andar descalza por fuego, y por una cuerda que tu precipicio sea la muerte, que tu propia mentalidad piense que el destino es inexistente, otra vez dicho... Pero la vida te puede cambiar en un segundo, un segundo en el que tus células de los ganglios linfáticos deciden ser malignas. O peor, las de tu mejor amiga, tu hermana, persona que te aguanta cada segundo, te entiende, te hace reír, persona que no se enfade contigo, que no te decepcione ni tenga puñales guardados en el bolsillo. Ella, de tez blanca, mejillas tintadas de rojo a veces en sus cambios de temperatura, cabello de castaño oscuro, sonrisa perfecta, esa sonrisa que te hace tan feliz... Suya, sólo suya, su forma de hablarte, llorar en los momentos melancólicos junto a ti y que no le interese lo que piensen los demás, pensamiento idéntico al tuyo. Dulce delicada. Sé que un cáncer es símbolo de muerte. Ya había saboreado que alguien cercano lo tuviera y se desvaneciera, pero esta es la historia que mas me conmueve, por que ella no es sólo cercana, es parte de tu ser... Y ahora empieza tu historia

Luces adelantadas. Luces doradas. Típicas de navidad, esperas una llamada, no entiendes nada, observas llamadas perdidas de móvil cada segundo, sólo han pasado dos semanas desde la biopsia, desde que la ibas a ver al hospital siempre, pero esa imagen, ese doctor entrando en la habitación del hospital con expresiones serias, últimamente entraba con sonrisas, preguntando que que tal llevaba eso de estar ingresada, y exclamando que tenía bastantes visitas, pero no, esta vez a entrado, que con una mirada ha pedido que salgamos de la habitación, día largo. Diecisiete de Diciembre, sigues esperando esa llamada, hasta que llega, las manos y las yemas de los dedos tiemblan, pequeñas vibraciones, un nudo en el estómago y malos presentimientos, al fin oyes la palabra, esa que ya te lo ha dicho todo; Clínica Universitaria de Pamplona, cuelgas, das una bocanada de aire, y miras hacia la pared, puedes pasarte así horas, la garganta se te llena de rabia, y tus ojos empapados y llenos de lágrimas abrasadoras, no puedes más, gritas, un grito agudo, demasiado agudo, ¿Por qué? ¿por qué a ella? No. Entra ella a la habitación, sufres un ataque de ansiedad, nada mas te pregunta, que te pasa, por que lloras así, tranquilízate, venga, por favor. Intentas pronunciar, pero el llanto puede contigo, te pones tartamuda, luego respiras, irregularmente, el ataque de ansiedad no te deja respirar apenas, si acaso tener llantos, pero gritas, necesitas desahogarte, si no será peor, pero eso sólo es poco, aún no te entra en la cabeza, aún no te lo crees, la vida es injusta, te dan ganas de pegarle a la pared, salir de allí corriendo, ojalá que me hubiera pasado a mí. Mamá, tiene cáncer... No puedes seguir, ella te sigue masacrando a preguntas pero no, no se lo consigues decir hasta mas tarde, ni asimilarlo,es un tema tabú para ti.
Querida Bárbara, te echo de menos.
Por favor, sé fuerte.
¿ Por qué? No le encuentras sentido a las cosas, lo que mas te quebraba era que tus amigos, cuando te parabas a pensar, pensabas y era cierto de que estaban igual que tú, destrozados, por eso había que ser fuerte. Todos apoyándonos, y apoyándola, indirecta y directamente, como una piña, unidos, por ella, por nosotros, por todos.
Bar, te admiro, me pareces increíble, mostrando una sonrisa incluso cuando la muerte te perseguía, incluso cuando peor te sentías, seguías estando ahí, en mi corazón, en el de todos, te prometo, nuestras últimas navidades, malas, pero te prometo con toda mi alma, que estas, van a ser unas de las mejores de nuestras vidas. 
Cuando era pequeña, admiraba a Elsa Pataky, guapa modelo, quería ser como ella, llegar a ser alguien en la vida, cuando tenía 10 años, me importaba la ropa, salir, estar guapa, pero ahora, lo que mas importa, es la vida en cuestión, disfrutar al máximo, tú me has demostrado que la vida no es tu punto de vista, sino la vida es todo lo bueno que tenemos todos juntos, disfrutarla con los que te quieren, vivir, simplemente vivir, tener esperanza, ser fuerte y saber afrontar baches en tus caminos y estrechos, callejuelas y puentes.
Ha pasado el día diecisiete. Hace un año tuvimos que afrontar ser fuertes, hoy lo soy gracias a tí y sonrío gracias a tí


Te quiero.